Yoga: Lo que su práctica te enseña
Yoga: Lo que su práctica te enseña
By: María González Santos | Mar. 24, 2016
El yoga siempre ha tenido y tendrá un mensaje universal para todo el que lo practica, es la unión con uno mismo y con lo divino, pero dependiendo de cada persona, y del lugar en donde te encuentres dentro de tu trayecto vital, te indicará unas “claves o mensajes” siendo el objetivo final el mismo para todos, reconocer su autentica enseñanza.
Hoy me gustaría hablaros de mi experiencia personal , de lo que el yoga me ha ido aportando sobre la esterilla y fuera de ella:
Fluir
Tanto en la esterilla como en la vida, tenemos que relajarnos y fluir, si no ponemos resistencia todo es más fácil, y natural. Cada experiencia, cada momento es único e irrepetible, ni mejor, ni peor, simplemente forma parte de nuestro aprendizaje, fluye.
Aceptación
Igual que tras una tormenta siempre termina saliendo el sol, pienso que es importante tener en cuenta que cada día de práctica es diferente. Lo mismo ocurre con la meditación, unos días te encuentras relajado y flexible, y otros en cambio todo lo contrario, tu concentración disminuye y te sientes alejado de tu centro, es en esos días cuando hay que aceptar y no esperar resultados.
Regularidad
Lo importante no es el número de asanas que realices, sino la calidad, y regularidad en la práctica, más valen dos asanas realizándolas con lentitud y consciencia que veinte, de forma rápida y sin sentido.
Practica
Yoga es práctica, práctica y más práctica. Puedes tener una gran biblioteca sobre libros de yoga, aprenderte todo el nombre de las asanas en sanscrito, pero si no practicas, no hay yoga, tan solo conocimientos, no conexión.
Reflexión
Otro de los hábitos que he aprendido, ha sido el de ser más consciente y reservar unos minutos cada día, para reflexionar, lo mejor es hacerlo una vez terminada la práctica, ya que tanto nuestro cuerpo como nuestra mente, se encuentran en un estado de relajación y de presencia. Ten siempre una pequeña libreta para tomar notas de las reflexiones que has sentido.
Agradecimiento
El yoga es un regalo hacia uno mismo, un espacio de tiempo para escucharse, sentirse y quererse. Es por ello que llega a ser realmente necesario demostrar una actitud de agradecimiento, al finalizar nuestra práctica, sellándola con un mantra, una oración o un gesto. De esta forma dirigimos nuestra gratitud hacia el universo, hacia la conexión con lo divino.
Namasté
AHIMSA - Descubriendo el camino del amor
La palabra sánscrita Himsa significa daño. El ser humano es experto en esta práctica tanto a nivel global como particular; no hay más que ver los efectos que nuestro egoísta modo vida está causando en el medio ambiente, los constantes conflictos bélicos entre países, las dificultades que tenemos a la hora de aceptar lo que es diferente, al comunicarnos y lo mal que nos tratamos a nosotros mismos en muchos aspectos.
La luz y la oscuridad forman parte de la naturaleza de todas las cosas. Un elemento sin el otro no puede existir, porque el contrario da sentido y potencia esas cualidades. Me gusta pensar que nuestra sombra o lado oscuro es lo que nos da perspectiva a la hora de brillar con intensidad.
La otra cara de Himsa es Ahimsa, “la no violencia”. Este término filosófico se enmarca en tradiciones religiosas como el Hinduismo, el Jainismo y el Budismo, promoviendo una actitud de respeto hacia la vida humana, animal y vegetal desde una convivencia pacífica, amable y armoniosa.
El gran reto comienza cultivando ese espíritu primero en ti para sembrarlo después en tu entorno. Porque una cosa que está clara, si el cambio no se produce en tu interior como semilla, difícilmente podrás lograr un cambio a tu alrededor.