Rutina matinal saludable
Rutina matinal saludable
By: Flow Rapisardi | Sep. 02, 2016
Cada día de tu vida se convierte en una nueva experiencia. Amarnos, empoderarnos, nos acerca al fluir natural de la vida. Honramos cada segundo de este viaje, disfrutando plenamente.
Como siempre hablamos en los talleres y encuentros de yoga & meditación, tu bienestar está más cerca de lo que imaginas.
No hay nada que salir a buscar afuera, todo está dentro tuyo, simplemente necesitas comenzar a escucharlo y contemplarlo.
Cada mañana es una nueva oportunidad para sentirte mejor y mejor, para mimarte, cuidarte y revitalizarte.
Te sugiero esta simple y rápida rutina antes de salir de casa, que no te tomará más de 10 minutos y seguramente modificará sustancialmente el comienzo de tu día:
- Ponte siempre el despertador unos 15 minutos antes.
- Comienza a estirarte en la cama con los brazos hacia arriba y los empeines hacia adelante.
- Realiza los movimientos que tu cuerpo te pida, el sabe lo que necesita al despertar.
- Conecta con tu respiración abdominal realizando un conteo de 15 respiraciones con ambas manos en tu abdomen.
- Gira tu cuerpo de costado en posición fetal o de capullo y levántate suavemente de costado.
- Siéntate en la cama con tus pies tocando el suelo y comienza a movilizar tu cuello 3 veces a cada lado.
- Haz lo mismo con tus hombros, inhalando al subirlos y exhalando al rotarlos hacia atrás.
- Moviliza tus muñecas y tobillos unas cuantas veces.
- Realiza unas 10 respiraciones nuevamente en el abdomen.
- Quédate en silencio con tus manos sobre los muslos unos minutos contemplando y registrando tu respiración en las fosas nasales.
- Si quieres y te dan ganas puedes sumar a tu comienzo alguna intención, afirmándola en tiempo presente, en primera persona y repitiéndola 3 veces.
Ya estás listo/a para empezar tu día con toda la energía! No te olvides de prepararte un rico y nutritivo desayuno que también forma parte de tu rutina saludable.
Recuerda siempre que tu cuerpo es tu templo y le debes respeto y cariño.
Namaste
Claves para hacer Matsyasana
Esta postura honra a ‘Matsya’, encarnación del dios hindú ‘Vishnu’ como pez. Como veíamos en este artículo la postura del pez encierra enormes beneficios para nuestro cuerpo y mente, sin embargo, es una de esas poses que da respeto y cierto temor poner en práctica. Posiblemente, la extensión cervical que se realiza, sea lo que más miedos genere y en personas con algún tipo de patología en el área cervical debe tener cuidado, pero no por ello dejar de hacerla.
Es por ello que nos hemos animado a comunicar en este artículo todas las claves para hacer Matsyasana, con sus variantes y de forma segura.
1º Para prepararla: podemos hacer antes el Camello (Ustrasana), la Cobra (Bhujangasana) o el Puente (Setu Bandhasana) para ir abriendo el cuerpo
2º La mirada: irá dirigida hacia el tercer ojo o punto del entrecejo.
3º Para facilitarlo:
-No dejamos caer la cabeza hacia atrás.
-Empezamos a trabajar en posición sentado: desde la postura del Bastón (Dandasana) nos inclinamos hacia atrás sobre las manos o los codos mientras elevamos el pecho para recrear la curvatura de la espalda de la curvatura del pez.
4º Esta postura requiere de concentración, de estar muy presentes en lo que hacemos, ya que si no lo hacemos podemos sobrecargar el peso sobre la cabeza haciendo así daño sobre el cuello, cuando realmente la postura se sostiene desde los codos y antebrazos.
5º El tiempo recomendable para mantener esta postura y beneficiarse de sus poderosos efectos estaría en torno a 5 respiraciones en adelante, siempre y cuando nos sintamos bien y NO HAYA DOLOR.
6º Es importante recordar que una vez dentro de la postura nuestra mente ha de estar encauzada en las sensaciones corporales, y con nuestra motivación podemos ayudar a que estas sensaciones sean más intensas si vamos investigando sobre nuestros propios límites, observando cómo reacciona nuestra mente cuando nos acercamos a ellos.
7º También debemos recordar, una vez dentro, de sentir como si el corazón saliese del pecho, incrementando el arco desde el hueso púbico hasta la garganta.
8º Las contraposturas más adecuadas para compensar los efectos de Matsyasana son: abrazo a las rodillas en el pecho y balancearse de lado a lado, todos los ejercicios de relajación de cuello, la postura de la Tabla (Kumbhakasana) o la postura de la Guirnalda (Malasana).
Seguro que con estos sencillos consejos la próxima vez que realicemos la postura del pez veremos notables diferencias. Si queréis comprobarlo, os proponemos esta clase guiada por nuestra profesora María Paula Quintana “El Sabor del Yoga” ¡Os esperamos en Aomm.tv!