Esta práctica se enfoca en el segundo chakra y combina un kriya corto y energético para liberar la tristeza acumulada en forma de tensión en la pelvis y las caderas, con una meditación que promueve la liberación de conflictos del pasado.
Crea profunda conexión con tu respiración, fortaleciendo la capacidad de conectarte con el momento presente.
Props: manta o cojín pequeño opcional