Estilos de yoga: Vinyasa Krama
Estilos de yoga: Vinyasa Krama
By: Carla Sanchez | Oct. 13, 2015
La disciplina del yoga comprende diversos estilos que pueden practicarse y adaptarse a las necesidades de la persona. Algunos de los más populares son el antiguo método de Hatha yoga, el dinámico Ashtanga, el enérgico Kundalini, o el terapéutico yoga Iyengar.
Cada uno de ellos tiene sus características particulares, un linaje, una técnica distinta de abordaje de las posturas y un ritmo. Todos se complementan y enriquecen entre sí, aportando a la práctica infinidad de matices y un camino de aprendizaje de largo recorrido para el yogui. Sumergirse en las aguas del yoga es comenzar un viaje que no tiene final.
Uno de los estilos más creativos es el Vinyasa Krama.
Puede definirse como un impresionante movimiento sincronizado, que incorpora la duración y el ritmo de las inhalaciones y las exhalaciones a través de la práctica enlazada y fluida de asanas.
Tiene sus raíces en el sistema Ashtanga Vinyasa tradicional, así como en el Hatha yoga en sus formas más dinámicas.
Si desglosamos la palabra, Vi significa “variación” y nyasa significa “parámetros recomendados”.
Otra de sus traducciones es “respiración en movimiento” y representa la cadencia del aire que respiramos de forma suave y controlada durante la práctica, como el gran motor de nuestra vida.
El practicante de Vinyasa se expresa, crea y dota de significado al movimiento desde la respiración “Ujai”; enlazando cada postura con las tomas de aire. Consiste en inhalar por la nariz, cerrando la glotis al exhalar, de manera que se produce un sonido suave que recuerda al sonido del océano; se le llama también respiración oceánica.
La inhalación se asocia a movimientos de expansión, es decir, cuando el cuerpo se abre, por ejemplo elevación de brazos, aperturas de pecho, o extensiones.
Se exhala cuando hay un movimiento de contracción o de cierre, como una flexión hacia adelante. El entendimiento de este mecanismo se integra rápidamente ya que es muy intuitivo y el cuerpo lo comprende sin dificultad.
La respiración es el nexo entre el cuerpo y la mente, manifestando el significado del yoga en todo su esplendor.
La palabra Krama puede traducirse como “pasos”.
La práctica de Vinyasa Krama implica secuenciar la serie de forma coherente y progresiva hacia un objetivo específico, o una postura final de mayor complejidad, por lo tanto el orden nunca es aleatorio.
La secuencia se va construyendo a través de posturas que se aproximan al objetivo elegido, los Kramas, que preparan y potencian los beneficios a obtener. Una clase de Vinyasa dibuja una pirámide evolutiva clara, ascendiendo hacia una asana cumbre y descendiendo después hacia la relajación metódicamente.
Una práctica nunca es igual a la anterior, jugar con los Kramas abre un abanico extensísimo de posibilidades, pudiendo trabajar distintos aspectos posturales: equilibrios, extensiones, flexiones… organizando la secuencia con inteligencia, pero también con libertad, de ahí su carácter creativo.
Ordenar la práctica de yoga en base a los Kramas, tiene un reflejo interesante en la aplicación de ese orden en la vida diaria. Escoger el objetivo y trazar una ruta lógica y que favorezca alcanzarlo, parece tener sentido.
El enlace entre posturas se hace a través de distintos Vinyasas, elaboradas variaciones en movimiento que ejercen de transición, manteniendo la práctica en un flujo constante. Se permanece en las posturas un máximo de cinco respiraciones antes de pasar a la siguiente; aunque parezca que uno está estático, en realidad el movimiento respiratorio sigue dando fluidez y continuidad al asana, nunca se está inmóvil del todo.
Es una técnica poderosa que favorece la concentración, genera calor interno, traduciéndose en una oleada permanente de energía física, que ayuda a la mente a tomar distancia del ruido externo e interno que nos rodea. Esta se flexibiliza y libera tensión.
Esta disciplina potencia una actitud más activa que otros estilos de yoga. Es vigorizante, armoniza el cuerpo y también lo desafía de forma creativa, ya que la imaginación está muy presente a la hora de crear secuencias, llevando a quien lo practica hacia el reto de conocerse a sí mismo en profundidad y a todos los niveles.
El Vinyasa yoga, es la danza misma de la existencia sobre las olas de las respiración consciente.
Si quieres probar a practicar este estilo de yoga: Vinyasa Krama, en Aomm.tv disponemos de un amplio catálogo de clases guiadas, encuentra tu clase y empieza a practicar.
Te esperamos en Aomm.tv
Posturas de yoga preferidas por las mujeres
Hoy nos atrevemos a apostar por cuáles son las posturas que más gustan a las mujeres. Basándonos en las preferencias que escuchamos de nuestras alumnas, las hemos resumido en estas cuatro, pero nos encantaría saber cuál es la postura que a ti más te gusta y porqué.
Tal vez en la siguiente lista te encuentres identificada en alguna:
1-. VIRABHADRASANA II” (Postura del guerrero II)
Con esta postura las mujeres sienten cómo se fortalecen sus muslos, glúteos y caderas. Aporta equilibrio y armonía a la postura. Hacer el guerrero II requiere de mucha energía, por lo que se debe respirar profundamente, al tiempo que los brazos y las piernas se mantienen firmes.
2-. UTKATASANA” (Postura de la silla)
A muchas mujeres les gusta mucho esta resistente postura porque a través de ella sienten cómo trabajan las nalgas. Además con ‘la silla’ se fortalecen el vientre, la espalda y los muslos. Es fundamental que al flexionar las rodillas, nunca más allá de la punta de los pies, la columna se mantenga lo más larga posible, sintiendo una línea continua desde la coronilla hasta el coxis. Los hombros deben de estar relajados y buscan formar parte de esa línea entre coronilla y coxis.
3-. VRKSASANA” (Postura del árbol)
Cuando sentimos la mente dispersa, la postura del árbol nos ayuda a aumentar nuestra capacidad de concentración y calmar la mente. Mejora el equilibrio, fortalece los tobillos, las caderas y rodillas. Es importante que el pie que se apoya en la otra pierna no lo haga nunca sobre la rodilla, ya que es un punto articular del cuerpo fundamental sobre el que no debe recaer un sobre peso innecesario. Para ello te recomendamos que si no llegas a colocar el pie en la cara interna del muslo contrario, lo hagas en el tobillo.
4-. SETU BANDHASANA” (Postura del puente)
Con esta extensión se fortalece y se abre el pecho, las caderas, la espina lumbar y la cara anterior de los muslos. Para las mujeres es un estiramiento excelente después de cualquier sesión de ejercicio físico, ya que el puente actúa directamente sobre el sistema nervioso. Al deshacer la postura se puede realizar de manera dinámica, articulando la columna en la bajada vértebra a vértebra, percibiendo como cada hueso vertebral se coloca sobre el suelo.