Cómo mantener tus propósitos

Cómo mantener tus propósitos
By: María González Santos | Dec. 29, 2015
Se acerca el final de otro año, y como es habitual, empezamos a planear nuevos propósitos, salpicados de esperanza, buenas intenciones, cambios que nos han ido rondado hasta ahora por la cabeza, y que hemos ido aplazando, como si no encontrásemos nunca el momento correcto para comenzar.
Es cierto que es bueno marcarse fechas, para tener impulso y firmar un compromiso personal a partir de un día en concreto, pero eso solo no es suficiente.
Quizá uno de tus propósitos pueda ser comenzar un deporte, dejar de fumar, comer más sano, eliminar el café, etc…no importa la meta que te hayas propuesto, lo importante es tener una fuerte disciplina y claridad mental.
Lo que está creado por la mente, no puede ser eliminado de la misma forma. La mente es manipuladora, y a la hora de que intentemos alejarnos de un mal hábito o de implantar uno positivo, entrará en juego y nos dará mil razones para boicotearnos. Utilizará herramientas del pasado para confundirte y hará que dudes de tus nuevas decisiones.
Estrategias que pueden ayudarte:
1. Reserva cada día un periodo de tiempo para estar a solas, puedes hacerlo simplemente tomando una taza de té, en un lugar silencioso y tranquilo o dando un paseo. Escúchate, pero desde dentro, enfócate en tu corazón ¿que te dice?. Estos momentos te servirán para aclarar tu mente, y pensar de una forma menos confusa.
2. Observa tus pensamientos, existen técnicas muy efectivas de meditación. Si conoces el funcionamiento de tu mente será más facil no dejarse atrapar por ella. Una técnica es sentarte (preferentemente en posición cómoda de meditación), cerrando tus ojos y siendo consciente de como van pasando tus pensamientos, imagina que son nubes, solo observa. Verás que son efímeros y cambiantes, no permanecen durante mucho tiempo. Si los dejas ir, desaparecerán. De está forma te darás cuenta de que muchas veces la actividad de tu mente te aleja de la concentración necesaria para conseguir tus objetivos.
3. Si has tomado ya una decisión y conoces realmente tu propósito, mantén tu posición, y fija un periodo de tiempo para llevarlo a cabo, por ejemplo, tres semanas sin beber café. Si a lo largo de esos días sientes el deseo de hacerlo, mantén tu atención a la altura del corazón, y no en la mente, respira profundo y lento. De esa forma obtendrás claridad mental para modificar o cambiar cualquier hábito, sin dejar que tu mente te distraiga.
4. Para tener más disciplina, confía tu propósito a algo superior, puede ser un maestro espiritual, o a tu verdadera intención de superarte y ofrecer el máximo respeto a tu verdadero ser.
5. Y por último, no olvides tu práctica diaria de yoga, si aún no has comenzado, te animo a que lo hagas, ya que es la mejor forma de aprender a conocerte, y de escuchar lo que la naturaleza realmente tiene preparado para ti.
Integrar los movimientos de la columna

Raúl Torres, profesor de yoga en Aomm.tv, firma este artículo que apareció publicado en la revista Yoga Journal en otoño del 2015. En él nos habla sobre una de las clases que puedes encontrar en el catálogo de clases de yoga de Aomm.tv.
Integrando los 4 movimientos de la columna.
Este mes te proponemos una práctica de Yoga completa con el ritmo propio de una clase normal y en la que se realizan unos estiramientos iniciales para calentar los músculos y articulaciones, unas vueltas al Saludo al Sol (Surya Namaskar) con variantes y, seguidamente la secuencia de asanas en la que la particularidad es que se integran los 4 movimientos de columna (inclinación, flexión, extensión y torsión). Durante la práctica quizá sea necesario el uso de una silla, mantas y cinturón como soportes para facilitar la misma. Recuerda que no es necesario sobrepasar tus límites, parando en cualquier instante que lo desees sin perder la atención a las sensaciones despertadas.
Puedes ver la práctica completa en este enlace.
El propósito del Yoga es alcanzar armonía y equilibrio a todos los niveles y para ello existen varias vías para lograrlo. Una de esas vías es el Hatha Yoga, el Yoga físico, cuya herramienta es el cuerpo; y desde el cuerpo se activan los mecanismos para intentar despertar y experimentar la sensibilidad y conciencia necesaria para alcanzar ese inagotable manantial de tranquilidad que trasciende y profundiza en el propio Ser.
El Hatha Yoga hace del cuerpo el campo de pruebas de la trascendencia, siendo la columna vertebral una parte fundamental en lograr ese estado deseado por todos. Y, no solo de la columna, sino además de toda la musculatura y tejidos que la arropa. Todo el sistema nervioso central, que va a través de la columna, y los nervios espinales que se diseminan por todo el cuerpo y órganos, cuyo origen es la propia médula espinal, hace que su salud sea esencial para un trabajo físico íntegro y global, así como para conseguir que los flujos de energía estén estables. Por tanto, el disponer de una columna vertebral en buena condición nos facilita ese “sentirnos mejor”.
A través de una práctica en la que el alineamiento y precisión juegan un papel importante y en el que se da movilidad a la columna en todas sus direcciones, realizando los 4 movimientos posibles ( inclinación, flexión, extensión y torsión) fomentamos una espalda y columna flexible y llena de vitalidad, fortaleciéndola y tonificándola, facilitando el buen funcionamiento de los órganos internos asociados, así como, el equilibrar a todo el cuerpo en sus funciones vitales. Pero siempre desde la conciencia y el respeto hacia uno mismo, sin forzar ni sobrepasar sus límites anatómicos y/o dolencias físicas diagnosticadas, desde la sensibilidad y atención que produce y estimula la propiocepción, manteniendo una respiración consciente que ayude y que origine que cualquier matiz, cualquier pequeña sutileza en el movimiento y/o en la respiración se convierta en algo extraordinario. El asana se transforma en la espiritualidad hecha materia.