La intención en la práctica del Yoga
La intención en la práctica del Yoga
By: Carla Sanchez | Mar. 03, 2016
Los seres humanos somos por definición “empíricos”, basamos nuestro día a día en la experiencia para aprender, evolucionar, relacionarnos con los demás y con nosotros mismos. El plano mental es el predominante, todo pasa primero por el intelecto y usamos la razón como filtro para desenvolvernos en la vida.
El camino del yoga nos insta a la búsqueda de una existencia más equilibrada en la que cuerpo, mente y sentimiento conviven en conciencia y armonía. Los objetivos del yoga pueden variar temporalmente a medida que avanzamos en el aprendizaje de esta disciplina, pero el camino tiene una única dirección, “la realización del ser”.
La práctica de asanas despliega ante nosotros un repertorio infinito de posibilidades en el aprendizaje. Para ir más allá de la vivencia física, está además la intención que le otorgamos al ejercicio del yoga, el propósito tras la postura.
Lo que sucede sobre la esterilla trasciende al plano vital y nos sirve de espejo. Allá donde ganamos flexibilidad, un área de la vida se flexibiliza también, allí donde encontramos rigidez se pone de manifiesto un bloqueo mental, aquello que nos desafía físicamente fortalece profundamente nuestra personalidad…
A veces, el foco de una práctica surge de forma intuitiva y espontánea, pero por lo general es algo que podemos trabajar intencionadamente.
Foco físico-mental:
El yoga puede estar dirigido a obtener beneficios meramente físicos y esa es sin duda una forma de empezar, por ejemplo: mejorar la apertura en las caderas, ganar agilidad, tener mayor elasticidad en las piernas, o desarrollar el equilibrio.
Cualquiera de estos aspectos se trabaja mentalmente en paralelo, incluso si no se es consciente de ello; progresivamente dará sus frutos aumentando la percepción de los que somos y del mundo en el que vivimos. La conciencia irá emergiendo a su debido tiempo.
Foco emocional-espiritual:
Hay múltiples maneras de canalizar un objetivo u emoción durante la práctica de yoga favoreciendo el hecho de estar presentes en lo que hacemos y sentimos. A medida que la comunicación con el cuerpo está más despierta afloran sentimientos como el amor, la compasión, o la paz interior, emociones que pueden guiarnos a través de la ejecución de posturas. También podemos deshacer emociones como la ira, o aliviar la tristeza, ayudando a canalizarlas y finalmente a soltarlas del todo.
Las emociones positivas se potencian irradiando nuestro ser y a todo lo que nos rodea.
Dale intención a tu yoga, despierta tu sensibilidad y escúchate, crece desde tu cuerpo hacia tu interior y después de nuevo hacia afuera, en infinita expansión del ser de luz que eres.
Te recomendamos la clase de Heidy Toledo 'Atención e intención en las transiciones' para profundizar en la introducción de la intención en la práctica de Vinyasa yoga
Namaste.
Cómo hacer Viparita Karani o la postura del gesto invertido
Viparita Karani es una asana de yoga que brinda equilibrio y serenidad a practicantes de todos los niveles. En este artículo, explicamos cómo hacer esta postura, sus beneficios y consejos para practicarla con seguridad.
Tabla de Contenidos
- Paso a Paso: ¿Cómo hacer Viparita Karani?
- ¿Quién puede hacer esta postura?
- ¿Existen contraindicaciones para la postura Viparita Karani?
- Variantes de Viparita Karani
- Errores comunes y cómo evitarlos en Viparita Karani
- Beneficios de Viparita Karani
- ¿Qué significa Viparita Karani?
- Integración de Viparita Karani en una rutina de yoga
Paso a Paso: ¿Cómo hacer Viparita Karani?
La Viparita Karani es una postura restaurativa que requiere paciencia y delicadeza en su ejecución. Esta es la forma correcta de practicarla:
- Comienza sentándote con la cadera y el hombro derecho pegados a una pared.
- Flexiona las rodillas, acercando los talones a las nalgas, y mantén la cadera cerca de la pared.
- Inclínate hacia atrás, apoyándote en los codos y subiendo las piernas por la pared hasta que tu espalda esté completamente apoyada en el suelo.
- Asegúrate de que tu cuerpo esté simétricamente alineado en el suelo.
- Con las piernas verticales sobre la pared, elige la posición de tus brazos: sobre el abdomen, a lo largo del cuerpo, o estirados por encima de la cabeza.
- Relaja los hombros y mantén la parte posterior del cuello alargada.
¿Quién puede hacer esta postura?
Viparita Karani es una asana excepcionalmente inclusiva. Desde principiantes en yoga hasta expertos, casi todos pueden beneficiarse de su práctica. Su naturaleza suave y restauradora la hace ideal para quienes buscan un alivio del estrés, una mejora en la circulación o simplemente un momento de tranquilidad y reflexión.
¿Existen contraindicaciones para la postura Viparita Karani?
Aunque Viparita Karani es generalmente segura, existen algunas contraindicaciones. Personas con afecciones oculares graves como glaucoma, problemas cervicales significativos, o hipertensión deben evitar esta postura. Además, mujeres durante su ciclo menstrual o personas con hernias inguinales deben consultar a un profesional antes de practicarla.
Variantes de Viparita Karani
La Viparita Karani puede modificarse para adaptarse a diferentes necesidades y niveles de habilidad:
- Variante básica: Acostado boca arriba, simplemente coloca las piernas contra la pared sin elevar la cadera.
- Con soporte: Usa mantas o un cojín debajo de las caderas para una elevación suave, lo que aumenta el estiramiento suave en la zona lumbar.
- Piernas separadas: Con las piernas extendidas hacia arriba, lentamente sepáralas para un estiramiento adicional en la parte interna de los muslos.
Errores comunes y cómo evitarlos en Viparita Karani
Practicar Viparita Karani puede parecer simple, pero hay errores comunes que pueden reducir su efectividad o incluso causar malestar. Aquí te explicamos algunos de estos errores y cómo evitarlos:
- Alejamiento excesivo de la pared: Algunos practicantes se colocan demasiado lejos de la pared, lo que disminuye el apoyo necesario para las piernas. Es fundamental iniciar la postura con las caderas lo más cerca posible de la pared.
- Tensión en los hombros y el cuello: A menudo, se genera tensión innecesaria en los hombros y el cuello. Mantén estos puntos relajados, apoyando tu cuerpo de manera equilibrada sobre la espalda.
- Forzar la postura: Forzar las piernas a permanecer rectas puede causar tensión. Si es necesario, permite una ligera flexión en las rodillas para mantener la comodidad.
- Respiración superficial o irregular: Una respiración profunda y constante es crucial en yoga. Evita respirar de manera superficial y enfócate en respiraciones largas y profundas durante la práctica.
Beneficios de Viparita Karani
La Viparita Karani es una postura que ofrece numerosos beneficios, tanto físicos como mentales:
- Alivio de la fatigaEsta asana invierte el flujo de sangre, proporcionando un alivio inmediato para piernas y pies cansados.
- Mejora en la circulaciónLa inversión suave promueve una mejor circulación sanguínea, especialmente útil para personas que pasan largas horas de pie o sentadas.
- Reducción del estrésAl fomentar la relajación profunda, esta postura ayuda a disminuir los niveles de estrés y ansiedad.
- Beneficios para el sistema endocrinoEstimula las glándulas tiroides y suprarrenales, contribuyendo al equilibrio hormonal.
- Mejora del sueñoSu efecto calmante sobre el sistema nervioso puede ayudar a mejorar la calidad del sueño y combatir el insomnio.
¿Qué significa Viparita Karani?
El término ‘Viparita Karani’ se traduce como ‘acción invertida’, reflejando su forma física y su capacidad para invertir los efectos del tiempo y la gravedad en el cuerpo y la mente. En el contexto del yoga, esta postura simboliza el rejuvenecimiento y la renovación, tanto física como mentalmente.
Integración de Viparita Karani en una rutina de yoga
Incorporar Viparita Karani en tu práctica regular de yoga puede maximizar sus beneficios. Aquí te damos algunas ideas sobre cómo hacerlo:
- Como parte de una secuencia restaurativa: Incluye Viparita Karani hacia el final de una secuencia de yoga restaurativa o suave, especialmente después de posturas activas o de pie.
- En combinación con posturas de apertura de caderas: Después de posturas que enfatizan la apertura de caderas, como Baddha Konasana, Viparita Karani puede ser una excelente manera de relajar esa área.
- Como una transición hacia el final de la práctica: Utiliza Viparita Karani como una transición hacia posturas finales más relajantes, como Savasana, para integrar los beneficios de tu práctica.
- En secuencias enfocadas en el alivio del estrés: Dada su capacidad para reducir el estrés y la ansiedad, incorpora esta asana en secuencias diseñadas específicamente para este propósito.