Yoga en suspensión

Yoga en suspensión
By: Gaia Staff | Jan. 07, 2016
Es verdad que en el mundo del entrenamiento, y sobre todo del fitness, cada vez que se habla de una nueva forma de entrenar o de nuevos mecanismos para poner a mover nuestro cuerpo, parece que se ha descubierto la pólvora. Hace unos días nuestra profesora de pilates Karol Tamayo, nos hablaba del entrenamiento en suspensión y su aplicación en el Método Pilates “como un entrenamiento que permite realizar ejercicios multidimensionales, útiles, eficaces y seguros con el propio peso corporal y la fuerza de la gravedad, que desarrollan la fuerza y al mismo tiempo mejora la flexibilidad, equilibrio y la estabilidad de la parte central del cuerpo (core)”
Por fin estamos siendo conscientes de que el cuerpo no entiende de músculos, sino de movimientos. Es decir, que el trabajo analítico y específico en una máquina para fortalecer un músculo en concreto, estaba muy bien, pero es un trabajo aislado, y si pensamos bien: ¿En nuestra vida cotidiana cuándo usamos el bíceps y solo el bíceps? Más bien nunca…
Nuestra pregunta sería: ¿Es aplicable también al yoga?
Como sabemos, el yoga es una excelente disciplina para trabajar la fuerza, la flexibilidad, la coordinación y, por supuesto, la relajación. El TRX es una de las herramientas más conocidas para trabajar en suspensión. Es un sistema de cuerdas y cintas, que se sujetan al techo o cualquier elemento en alto que nos proporcione una sujeción adecuada. Gracias a su extraordinaria flexibilidad el TRX es el perfecto complemento del yoga, apoyándolo en los movimientos más avanzados.
Las posturas de yoga que habitualmente realizamos en el suelo, ahora se combinan con la suspensión en el TRX, permitiendo profundizar en algunas posturas que de otra manera no hubiera sido posible. Es importante que recordemos que estamos practicando yoga, no entrenando con el TRX. Lo que significa que se respetará el ritmo armonioso y estable del movimiento junto a la respiración.
Entre los beneficios que contamos gracias a esta nueva herramienta:
1º Se potencian los efectos del yoga: tanto para aumentar la fuerza, mejorar la alineación corporal, el equilibrio, la flexibilidad..
2º Es un ejercicio amable con las articulaciones y se centra mucho en el core, despertando las capas más escondidas de nuestro núcleo central.
3º Ninguna lesión nos impedirá practicar esta variante de yoga en suspensión.
4º Lograremos relajar las tensiones mientras trabajamos la fuerza corporal de la parte superior e inferior del cuerpo
5º Aumentaremos en gran medida la movilidad.
Esperamos que os haya resultado revelador este nuevo concepto para introducir en vuestras prácticas. Si tienes un TRX no dudes en empezar a probarlo. Si no, no te preocupes, sigues contando con nuestro amplio catálogo de clases para realizar dónde y cuándo tú quieras.
Sentir

“ Confía en lo que sientes más que en lo que piensas” Chopra
¿Cuantas veces te encontraste frente a una situación en la que no sabías como actuar? ¿Cuantas veces te quedaste paralizado dándole vueltas a tu cabeza, agotando todas tus neuronas, pensando y pensando?
Hoy te propongo HABITAR el SENTIR, nadar en las aguas de las sensaciones, bucear en tus sentires y registrar todo lo que está ocurriendo en tu cuerpo y en tus pensamientos.
Primero es fundamental hacer un escaneo corporal para percibir como te sentís, si existe alguna molestia o lo que pudiera venir hacia ti.
Si no bajamos la ansiedad del cuerpo es muy difícil que nuestra mente se acople y se relaje, te lo digo por experiencia propia. Somos UNO y siempre sugiero antes de una buena meditación relajar el cuerpo con algunos ejercicios básicos como movimiento de cuello, hombros, muñecas, tobillos, estiramiento y rotación de columna sentados, como para tomar contacto más profundo con lo físico puro y empezar a percibir la energía que circula o está bloqueada en cada espacio.
Luego acompañá el proceso con unas 15 respiraciones nasales, lentas y profundas para ir bajando el ritmo cardíaco y oxigenar tu organismo.
En esta instancia ya vas a sentirte más conectado con tu ser, con tu corazón, con lo que realmente sentís profundamente.
Confía y seguí tu parte más intuitiva, es tu parte más genuina, aunque a veces nos de miedo. Pero una vez que la transcendemos nos abrimos a VIVIR, no a sobrevivir.
¿Escuchaste verdaderamente alguna vez los latidos de tu corazón?
Sentate en un zafu de meditación o en tu mat de yoga bien erguido y disponé tu mano derecha sobre el corazón, cerrá los ojos y disfrutá del movimiento natural de tu pecho. Luego de un minuto con la otra mano realizá un chasquido con el dedo pulgar e índice al ritmo de tus latidos, es decir, reproducí tus latidos en la mano contraria.
Estarás 100% en contacto con tu ritmo, ese ritmo que hoy está presente en ti y que mañana puede cambiar. Disfrútalo HOY.
Disfruta del VIAJE
Feliz VIDA