Alimentación en otoño-Nutrición inteligente

Alimentación en otoño-Nutrición inteligente
By: Carla Sanchez | Oct. 30, 2015
Nutrición inteligente: “come lo que la naturaleza te da”
Es innegable que el escenario ha cambiado. En el campo todo comenzó un poco antes, cuando aún estabas rascando días al verano, las cosechas empezaban a dar sus frutos y maduraban alimentos maravillosos listos para aportarte todo aquello que necesitas ahora para afrontar el cambio estacional.
El otoño es una época de reajustes y reflexión, donde se hace esencial crear equilibrio después de la distensión de los meses estivales, que por lo común, son algo desordenados tanto en horarios como en las comidas.
Debemos restaurar ese equilibrio en todas las facetas y cuando se trata de salud, la alimentación tiene un roll de suma importancia.
Lo que comes es el combustible de tu cuerpo y de la calidad de los alimentos que tomas dependerán tus niveles de energía y que tu salud se mantenga en plena forma.
Cada estación caigo fascinada una y otra vez ante lo que la tierra nos ofrece, porque tomar alimentos estacionales es una manera sencilla, lógica, e intuitiva de vivir en consonancia con la naturaleza y además de un modo más sostenible.
Todo lo que encontramos ahora en la huerta está destinado a fortalecer aquellos sistemas de tu cuerpo que se ven más comprometidos en las estaciones frías: el sistema respiratorio, el circulatorio y el inmune.
Verás que en el mercado también ha cambiado el decorado. Dejamos atrás la piña, la sandía y el melón, para dar paso a la granada, los cítricos y a un montón de frutas y verduras deliciosas.
La pequeña guía de alimentos que verás a continuación, te orientará sobre lo que debes añadir a tu despensa, sus propiedades y beneficios, para que aproveches al máximo los regalos del otoño, viendo cómo rápidamente tu cuerpo se fortalece, estás de mejor ánimo y te sientes en mayor armonía con todo.
Ni que decir tiene que además es un placer si te gusta mínimamente la cocina.
Frutas para fortalecer el sistema inmunológico:
– Limón: contiene altas dosis de vitamina C, mejora la circulación y es un gran antioxidante, además de tener un enorme efecto detox.
– Higos: llenos de fibra, minerales y vitamina B, son un auténtico antidepresivo.
– Granadas: tienen mucha fibra y sus antioxidantes son un gran anticancerígeno.
– Uvas: son una fuente de hierro, fósforo, vitaminas y es una fruta antifatiga.
– Kiwis, peras, manzanas y naranjas, Son frutas que se venden durante todo el año, pero la época propia es el otoño, así que merece la pena comerlas ahora porque son de mayor calidad y tienen un sabor y aroma más intenso.
Súper verduras:
Es momento de llenar la nevera de rábanos, nabos, col, coles de bruselas, brócoli, cebollas, puerros, calabaza, espinacas, escarola, coliflor y cardo, entre otras.
Todas ellas tienen en común la presencia de fibra, vitaminas, elementos antioxidantes de gran valor nutricional y como extra, nos ofrecen todo un abanico de sabores para enriquecer nuestra alimentación. Muchas de ellas, como el brécol o la cebolla, son consideradas anticancerígenas.
Para el sistema respiratorio y circulatorio:
– El limón: nos aporta vitamina C, que ayuda a combatir los virus, mejora la circulación y alcaliniza la sangre, aportando una condición de salud a la misma.
– El ajo: es un antibacteriano natural cuya fama medicinal es irrebatible, fluidifica la sangre, es antifúngico y antiviral, ideal para combatir catarros.
– La cebolla: es expectorante y antiinflamatoria, tiene propiedades antibióticas y es anticancerígena.
– Jengibre: es la raíz mágica, ayuda a entrar en calor, perfecto para personas con manos y pies fríos. Previene y ayuda a combatir los síntomas de la gripe y los resfriados y lo puedes combinar con limón.
Delicias extra:
Por último, auténticas delicias para el paladar de otoño, tenemos dos alimentos estrella, las castañas y las setas.
– La castaña: es un carbohidrato de excelente calidad pese a la fama que tiene de engordar, nos aporta energía, sacia y es rica en potasio.
– Setas: la variedad es magnífica y además de la paleta de sabores que nos ofrece, son fuente de proteínas vegetales, minerales como fósforo, hierro y potasio, de oligoelementos y estimulan las funciones nerviosas y cerebrales.
Yoga para dormir bien

El insomnio es uno de los males que más suele afectar a la población, junto con los dolores de espalda y cuello, patologías, todas ellas, muy ligadas al estrés y la ansiedad que el vertiginoso ritmo de vida moderno provoca en las personas. Pero disponemos de nuestra mejor herramienta para vencer al insomnio y a todas las afecciones asociadas a él: la práctica regular de yoga.
Las mejores posturas de yoga para dormir bien son las invertidas, las de flexión hacia delante, la del niño (balasana) o la del cadáver (savasana). Entre ellas vamos a destacar estas cinco:
1-. JANUSIRSASANA (Postura de la cabeza y la rodilla)
Doblamos la rodilla derecha y colocamos la planta del pie debajo del muslo izquierdo mientras apoyamos la rodilla en el suelo. Si no llegamos a apoyar la rodilla en el suelo, podemos utilizar un almohadón. Inhalamos y estiramos la espalda, exhalamos mientras nos flexionamos hacia delante estirando ambos brazos y manteniendo la espalda y el cuello estirados. Nos concentramos en la respiración profunda. Sostenemos entre 30 segundos y un minuto y cambiamos de pierna.