Colorea tu plato, colorea tu vida

Colorea tu plato, colorea tu vida
By: María González Santos | Dec. 09, 2016
¿Sabias que cuanto más color tiene visualmente un plato de alimento más beneficios nos aporta?, no me refiero a colorantes artificiales, sino a los colores naturales, los que nos ofrece la naturaleza a través de los alimentos.
En ellos podemos encontrar los famosos antioxidantes, pero…
¿Que son realmente?
Los antioxidantes nos ayudan contra el estrés oxidativo y el envejecimiento de las células. Gracias a ellos las células de nuestro cuerpo se encuentran protegidas ante ciertas enfermedades.
¿Como se llaman?
Los más conocidos son la vitamina C, la vitamina E, el betacaroteno, los flavonoides y polifenoles, también el selenio.
¿Donde se encuentran?
- En frutas: frambuesa, fresas, ciruelas, kiwi, pomelo, bayas de goji, uva negra, naranja, papaya, granada.
- En verduras: brócoli, alcachofa, col rizada, patata cocida, lombarda, pimiento, espárragos, zanahorias.
- En legumbres: lentejas, garbanzos, soja, alubias rojas.
- En especias: jengibre, tomillo, ajo, cebolla, pimienta, cúrcuma.
A evitar…
Hay algunas pautas que son recomendables evitar para no restarle estas propiedades a los alimentos, como por ejemplo…
- No mantener las frutas demasiados días en la nevera, ya que los antioxidantes no sobreviven más de un par de días.
- Que el tiempo de cocción de las verduras no sea excesivo, ya que al hacerlo los antioxidantes se verán afectados.
Teniendo en cuenta estas pequeñas claves alimentarias, gozarás de un buen aporte de antioxidantes, que darán color a tus platos y salud a tu vida.
Namasté
El baile del Vinyasa
Este artículo firmado por nuestra profesora Heidy Toledo, apareció publicado en el número 90 de la revista Yoga Journal, enmarcado dentro de la colaboración mensual que Aomm.tv y la revista especializada en yoga hemos mantenido durante varios años.
Vinyasa es la unión de la respiración con el movimiento. Es como un baile en el que nos movemos al ritmo de la respiración. Esta sencilla e inspiradora práctica nos dará las claves definitivas para entender en qué consiste el Vinyasa y poder empezar a ‘Bailar’.
Puedes ver la práctica completa en este enlace.
El Vinyasa deriva del linaje de Ashtanga. El Ashtanga por su parte fue creada por el yogui Sri Krishnamacharya. Por efecto, el origen de las clases de Vinyasa provienen de las series establecidas en Ashtanga.
En una clase de Vinyasa es costumbre incorporar música, meditación y la repetición de mantras. Al momento de empezar la clase, el maestro puede crear la secuencia según las peticiones y energias de los estudiantes, enfocadas alrededor de trabajar algunos musculos específicos, o preparación de posturas a distintos niveles.
En la secuencia se agregan posturas de pie (vīrabhadrāsana I), balance/equilibrio (vīrabhadrāsana III), rotaciones (pāśāsana), pliegues hacia delante (jānuśīrṣāsana), pliegues hacia atrás (uṣṭrāsana), inversiones (viparīta karaṇi) y muchas mas terminando en la postura del cadáver (Savasana) que es la ultima postura para relajarnos e integrar los beneficios de la sesión.
Durante los 75 minutos de practica los alumnos idealmente buscan la unión de la respiración con el movimiento. Es como un baile donde nos movemos al ritmo de la respiración. De esta manera buscamos el balance entre el cuerpo físico/energético y como consecuencia se calma la mente.
Estar concentrados en la respiración permite que la mente este en el momento presente sin tener que pensar en el pasado o en el futuro, que es lo que nos crea el estrés de cada día.
Con la misma respiración podemos manipular nuestra prana (o la energía de la vida) a través de todo nuestro cuerpo, desbloqueando áreas de tensión y bloqueos dando como resultado una salud optima.
La técnica de respiración que utilizamos es UJJAYI, esta técnica de respiración nos ayuda a calentar el cuerpo de adentro hacia afuera. Contrayendo un poco la parte trasera de la garganta (la glotis), como si estuviéramos empañando un espejo con los labios cerrados.
Hay que tomar en cuenta que la energía física y emocional de cada practicante varia de dia a dia, y por eso es importante escuchar nuestro cuerpo. Por defecto, muchas veces escuchamos a nuestro ego y no a nuestro cuerpo; hay que saber diferenciar el uno del otro.
Para reforzar lo anterior, podemos incorporar herramientas como bloques, cintas y almohadones, y si no los tenemos entonces nos volvemos creativos y utilizamos libros o el cinturón del marido! Recuerden si hay dolor en una pose de yoga no estamos hacienda yoga. Yoga no es dolor.
Y ahora a disfrutar un baile de Vinyasa!
Namaste
