Ejercicios de pilates: Patada Lateral de Rodillas

Ejercicios de pilates: Patada Lateral de Rodillas
By: Gaia Staff | Nov. 19, 2015
Este ejercicio es la continuación de la Patada Lateral o ‘The side kick’ pero con la dificultad añadida de que la superficie de apoyo se reduce a una mano y la parte inferior de la pierna.
El enfoque principal continúa siendo la estabilización del tronco y la flexión/extensión de la cadera. Según avanzamos en los niveles de los ejercicios de suelo, el papel del tren superior va ganando protagonismo, ya que cada vez soportará más carga. Deberán tener cuidado las personas con muñecas débiles y poca fuerza en el tren superior.
PREPARACIÓN
Utilizamos las mismas visualizaciones que usamos en la Patada Lateral con la sensación añadida de estar suspendido en el aire como un puente.
-Mantenemos la pelvis en posición neutra.
-Procuramos que el hombro del brazo de apoyo no se venza o que las costillas caigan hacia el suelo.
-Lo ideal es que logremos mantener la pierna elevada paralela al suelo, que no se caiga.
TÉCNICA
–Inhalación: en posición de rodillas, dejamos el peso sobre una rodilla. Colocamos la mano de apoyo (la del mismo lado que la rodilla de apoyo) en el suelo, justo debajo del hombro. Elevamos la otra pierna a la altura de la cadera, si se puede, por encima de ésta.
Colocamos la mano libre por detrás de la cabeza y el pie de la pierna de apoyo con el empeine estirado.
–Exhalación: balanceamos la pierna de arriba hacia delante, tanto como nos sea posible, con el pie en flexión y evitando que la pelvis retroceda (retroversión). Hacemos como un “doble rebote” ahí delante cuando esté en su máximo alcance.
–Inhalación: balanceamos la pierna hacia atrás, tanto como podamos, con el empeine estirado o el pie en punta. Evitamos la hiperextensión de la columna lumbar y la anteversión de la pelvis. Alargamos la pierna hacia atrás, haciendo una pausa en el punto de máxima extensión, antes de volver a balancearla hacia delante.
*Ejecutamos entre 6-10 balanceos, dependiendo del nivel de práctica, y cambiamos de lado.
ALGUNAS RECOMENDACIONES:
Si nos molestan mucho las muñecas, podemos:
1º Presionar el suelo con la punta de los dedos, para activar los flexores de las muñecas.
2º Cerrar la mano en forma de puño para eliminar la extensión de la muñeca.
3º Mediante la correcta colocación del hombro y el ajuste escapular, para aligerar el peso que se transmite a la muñeca
*Además es muy importante mantener la cabeza alineada con la columna para evitar tensión en el cuello.
BENEFICIOS
1-. Desarrolla la estabilidad del tronco.
2-. Control sobre la flexión / extensión de la cadera y su flexibilidad.
3-. Fortalece los abductores de la cadera.
Si os apetece probar esta subida de intensidad con respecto a la Patada Lateral tumbado y otros desafiantes ejercicios, os proponemos esta práctica guiada por nuestra profesora Olga Castañeda “Muévete desde el powerhouse”
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Claves de una secuencia de Vinyasa

Cuando asistimos a una clase de yoga nos dejamos guiar por el profesor sin cuestionarnos el orden, o el por qué, de la secuencia de asanas que vamos a realizar. Damos por sentado que tendrá un sentido específico, además del motivo inspiracional que se proponga y que será muy beneficioso para nuestra salud.
Efectivamente esa es la mejor actitud a la hora de afrontar una práctica, ya que el yoga no es un ejercicio de racionalidad, sino una vivencia personal en la ejecución de asanas como camino hacia el autoconocimiento, entre otros enfoques que se le puede dar.
Sin embargo, a todos aquellos que tenéis interés en aprender más sobre esta bonita disciplina, os gustará conocer con mayor profundidad el esquema y la intención a seguir cuando se traza una secuencia de Vinyasa Krama.
Para introducirte con más detalle en el Vinyasa, puedes leer el primer post que escribí para Aomm.tv, donde conocerás la esencia de este método. Recordemos también que el Vinyasa es un estilo de Yoga dinámico cuya base consiste en enlazar las posturas con la respiración poniéndolas en movimiento.
También nos referimos a Vinyasa para describir un flujo de asanas enlazadas que se practica entre posturas para generar movimiento y energía durante la práctica. Son una variación de Surya Namaskar, o Saludos al sol, aunque existen más de cien combinaciones diferentes que se aplican en función de la destreza del practicante.
Vinyasa Krama plantea un sistema lógico pero intuitivo en el diseño de una secuencia. Cabe destacar que una de las maravillas de este estilo es lo ampliamente creativo que resulta tanto para profesores, como para estudiantes. No hay una clase igual a la anterior y se trabajan siempre diferentes aspectos. Si el objetivo es el mismo, cambiará el abordaje.
Pondré un ejemplo para que se entienda mejor:
Una clase de Vinyasa puede tener el propósito de mejorar posturas de extensión; otra clase puede consistir en la apertura de cadera; y otra en fortalecer el abdomen como centro energético etc.
Pero también se puede escoger una finalidad mensual, como “el equilibrio”, y hacer un trabajo de exploración de esa cualidad a lo largo de las clases, pero practicando una secuencia nueva cada vez.
Partiendo de ese principio, la elección de asanas nunca es aleatoria. Cada postura prepara el cuerpo para la siguiente en progresión hacia la postura de mayor dificultad de la serie y que representa el objetivo, tanto físico como mental, escogido. Se va de menos a más hasta alcanzar la “postura cumbre”, que además suele tener la estimulante connotación de desafío.
Una vez pasado ese punto álgido, la práctica comienza a descender en intensidad y dificultad, para a evolucionar hacia la relajación y la meditación.
El dibujo de una clase de Vinyaya sería entonces como el de una montaña, una gran subida para llegar a la cima y un descenso amable para recuperarnos.
Ahora que conoces mejor la anatomía del Vinyasa, te invito a empezar a percibir en las clases la progresión y a observar qué sensaciones te aporta en tu propia práctica.
Namaste.