Qué comer antes y después de entrenar

Qué comer antes y después de entrenar
Por: Gaia | 23 marzo, 2017
+ Consumir alimentos que sean bien tolerados por nuestro organismo.
+ Incluir hidratos de carbono de lenta absorción: pasta, arroz, avena, cereales integrales, etc.
+ Consumo moderado de proteínas: pescado, carnes, huevos…
+ Mantener una alimentación baja en grasa, tarda más en digerirse y puede provocar fatiga. Mejor consumir moderadamente “grasa buena”: aceite de oliva, aguacate, frutos secos…
+ Beber suficiente líquido para mantener el organismo bien hidratado, prescindiendo de las bebidas azucaradas, gaseosas y alcohólicas.
Teniendo estas cinco premisas claras, vamos a ver qué comer según el deporte que realicemos. Como la variedad deportiva es tan extensa, hemos escogido dos tipos de actividades: “body-mind” y “cardio-aeróbico”, que sin ser opuestos, sí que su dinámica tiene diferentes exigencias energéticas.
Ejercicio “BODY-MIND”: YOGA, PILATES, TAI-CHI…
Antes: se recomienda no ingerir nada desde 2 horas antes de la clase. La intensidad de los ejercicios y la respiración como compañera de viaje en la ejecución de cada uno, requiere de un alto grado de concentración y soltura en los movimientos; por lo que si tenemos el estómago lleno, la energía corporal puede verse afectada.
Después: alimentos de fácil digestión que ayuden al cuerpo a mantener ese estado de equilibrio y control que han alcanzado durante la clase, por ejemplo: batidos de frutas naturales, yogures, frutos secos, cereales…
Ejercicio “CARDIO-AERÓBICO”: RUNNING, NATACIÓN, SPINNING…
Antes: como el cuerpo va a realizar un ejercicio de alta intensidad, es necesario que nuestras reservas energéticas estén llenas. Lo ideal es comer entre 1-2 horas antes de realizar la actividad, con alimentos ricos en hidratos de carbono de lenta absorción, como: frutas (manzana, ciruelas, frutos rojos…), cereales, arroz…
Después: las reservas energéticas han quedado vacías y la mejor manera de llenarlas es con alimentos ricos en hidratos de carbono de rápida absorción: frutas (plátano, pera, sandía…), ricos en proteína para la reconstrucción muscular: pavo, jamón… y por supuesto, un buen vaso de agua, zumo o batido natural, para recuperar la hidratación.
*Todos estos consejos tienen un carácter general, si se busca un objetivo concreto, las pautas varían dependiendo de cada caso.
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Esta completa práctica reúne posturas vigorizantes y otras relajantes, para darte una experiencia de fusión entre la exigencia física y mental con la suave e íntima sutileza de la respiración. Es una alquimia perfecta para llenarte de energía, con equilibrio y ecuanimidad.
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5 'Alimentos' que esta nutricionista nunca comería

Link PlaceholderPara una persona que conoce bien el funcionamiento del cuerpo humano, es evidente que también conocerá los alimentos adecuados para nutrirlo y alimentarlo de la manera más saludable. Hoy os vamos a contar qué alimentos nunca catará una conocedora de la alimentación y el organismo humano, algo que no gustará a algunos paladares… ¡Vamos a ello!
Dejemos a un lado los gustos particulares, los “de vez en cuando no pasa nada…”, los “es que está tan bueno…”, los “luego lo quemo en el gimnasio…” Aquí no vale lo que nos guste o apetezca, nos estamos refiriendo a lo que una persona que conoce el cuerpo y cómo funciona, nunca ingeriría para alimentar su organismo, por algo será…
1-. SNACKS FRITOS DE BOLSA
Doritos, bocabits, pelotazos, pringles… y toda la gama multicolor y ‘multisabor’ que se hacen pasar por el tubérculo que nace de la tierra y luego se fríe.
Los componentes de los aperitivos de bolsa son en su mayoría compuestos químicos en laboratorio: pasta de harina aderezada con colorantes, conservantes, saborizantes… de ahí, que podamos tomar una “patata sabor barbacoa”; desde luego, el aroma y sabor es a churrasco recién asado, pero te comes una pieza de puré de gluten con ese magnífico brebaje químico que aporta todo su sabor y color.
2-. LAS “CHUCHES”
Aquí tenemos otro claro ejemplo de colores que la madre naturaleza no conoce. Esto ya nos debería dar una pista: muy adecuado para nuestro organismo no puede ser algo que es de color azul turquesa, verde criptonita o rosa fucsia. Por no hablar de la cantidad de azúcar que contienen esos “palitos” de plástico.
3-. SALSAS Y ADEREZOS ENVASADOS
Aunque son una opción realmente fácil para esos días en los que vamos pillados de tiempo con el menú, cociendo un poco de pasta y vertiendo la salsa, podemos degustar de un delicioso plato de auténtica pasta italiana. Pero hemos de ser cuidadosos, ya que la mayoría de salsas comerciales contienen un alto porcentaje de azúcar y aditivos innecesarios. Mejor la opción casera y, si hacemos para que sobre, la podemos congelar.
4-. EDULCORANTES ARTIFICIALES
Recurrimos a ellos para restar calorías, pero hacen más daño que beneficio, sobre todo porque carecen de todo tipo de nutrientes y solo sirven para realzar un determinado sabor. El aspartamo es uno de los más utilizados y muchos productos lo contienen en su composición para crear un sabor adecuado, que haga que ese alimento nos resulte grato al paladar, incluso nos haga pensar que es lo más delicioso que hayamos tomado nunca. Es preferible una cucharada de miel para endulzar el café que recurrir a la sacarina. La stevia es otra opción natural y saludable para endulzar.
*BEBIDAS AZUCARADAS: REFRESCOS, GASEOSAS, ZUMOS ENVASADOS…
Y siguiendo la estela azucarada, dentro de esta categoría también incluimos las bebidas ‘light’, que aunque ponga que apenas contienen calorías, lo cierto es que los sustitutos que se usan para reemplazar al azúcar son peores para el organismo que si comiésemos a mordiscos el panal de una colmena.
En las que son ‘normales’, la enorme cantidad de calorías que aportan son inútiles, vacías, el cuerpo no puede tirar de ellas para rendir, irán directamente a los depósitos de reserva de grasas. Además, estos azúcares disminuyen el colesterol bueno e incrementan los niveles de triglicéridos, alteran nuestra respuesta inflamatoria, incrementando el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Para que nos hagamos una idea: un refresco de cola contiene el equivalente a 10 cucharadas de azúcar.
**Os proponemos un reto: convirtámonos en exploradores de nuestros sentidos y durante una semana intentemos no añadir azúcar donde normalmente se la echamos, encontremos el sabor original de los alimentos ¡nuestro paladar se volverá exquisito! Este artículo puede echarnos una mano, en él te contamos los secretos que encierra EL AZÚCAR.
5-. EMBUTIDOS ENVASADOS
Aunque nos parezca mentira que este tipo de alimentos pueda resultar dañino para nuestro organismo, lo cierto es que debemos evitar los alimentos que incluyen espesantes adicionales (en la mayoría llevan un alto contenido en gluten) y muchísimos conservantes. Tiene lógica si pensamos, sobre todo, en los derivados de animales (chorizo, jamón, pavo, salchichas, filetes, hamburguesas… envasadas al vacío) que requieren ser procesados para evitar la contaminación o la proliferación de microorganismos al entrar en proceso de putrefacción, algo que ocurre en pocos días. Es mejor optar siempre por la versión fresca o natural del alimento.
Que nadie se desanime, existen multitud de alimentos para nutrirnos y, además, extraer todo su sabor sin perder la capacidad de disfrutar de la comida.
Si quieres compartir con nosotros y toda la comunidad Aomm.tv qué alimentos son los que tú nunca comerías ¡adelante, te esperamos!