La alimentación durante el otoño

La alimentación durante el otoño
Por: Gaia | Oct. 08, 2013
Ha llegado el otoño, y con él la lluvia y el viento. Los árboles cambian de color brindándonos hermosos paisajes con coloridos bosques bajo un cielo gris plomizo. Poco a poco se irán desnudando para con sus hojas servir de protección a la tierra contra el frío que se avecina. Las aves comienzan su migración hacia lugares más cálidos donde pasar el invierno. Los animales se preparan para el invierno abasteciéndose de comida, buscando un lugar donde guarecerse o mudando su pelaje que les servirá de abrigo.
Todo en la naturaleza invita al recogimiento y la interiorización. Nosotros, humanos, aunque vivimos en modernos edificios con aire acondicionado y calefacción que nos enfrían en verano y nos calientan en invierno, también debemos recibir al otoño en nuestro cuerpo y nuestra mente, aceptar el cambio de estación y darle la bienvenida como se merece.
Al igual que la savia de los árboles desciende por sus ramas y su tronco para concentrarse y ser almacenada, preparándose para renacer en la siguiente primavera, así nosotros debemos brindarnos el tiempo de replegarnos, en actitud meditativa, cosechar los frutos de las experiencias vividas durante el verano y preparar la venida del oscuro invierno.
Las tardes lluviosas invitan a una buena lectura junto al calor del hogar, o a una charla relajada compartiendo una taza de té.
También se producen cambios en nuestras apetencias en lo que a alimentación se refiere. Se acabó el tiempo en que apetecía una ensalada fresca o un buen gazpacho. Ahora nuestro cuerpo nos pide lo que necesita: alimentos para el otoño cuya energía ayuda a interiorizar, calentar y relajar.
Es aconsejable comer menos ensaladas y bebidas frías y fruta, e incrementar el consumo de sopas, cereales, leguminosas y verduras de la estación, aderezado con especias como el jengibre, clavo, canela o hierbas aromáticas secas. Comenzamos a utilizar cocciones lentas que nos calentarán y reforzarán; también es aconsejable cocinar al vapor o en olla a presión.
El sabor estrella del otoño es el dulce; el dulce natural, no el azúcar y los pasteles. En estos meses es importante nutrirnos con alimentos dulces naturales. Podemos utilizar pequeñas cantidades de melaza para complementar platos. Alimentos cuyo sabor natural es el dulce son: arroz, avena, mijo, patatas, calabaza, boniato, zanahoria, frutas y frutos secos, garbanzos y lentejas, etc.
Ahora es época de cosechar, podemos encontrar gran variedad de frutas y verduras de la estación en nuestra despensa: calabazas, cebollas, nabos, calabacines, coles, manzanas, peras, melocotones, moras… Podemos hacer conservas y compotas o mermeladas y hacer acopio de reservas para el invierno. Además tomar la fruta cocinada es más apropiado para esta estación que comerla cruda.
Sopa de verduras y cochayuyo
El alga cochayuyo es poco conocida en nuestro país, aunque se puede encontrar en herbolarios y tiendas de productos ecológicos. Tiene un sabor suave y delicioso y es una gran fuente de calcio, magnesio, y otros minerales y oligoelementos.
Ingredientes:
• Alga cochayuyo
• Cebolla, ajo, patata, calabaza, repollo, coliflor, calabacin, nabo, boniato, o cualquier otra verdura de la estación.
• Aceite de oliva virgen
• Sal o caldo vegetal
• Tomillo seco
• Polvo de setas deshidratadas.
En una cazuela de barro con un fondo de aceite, rehoga la cebolla, el ajo, y el cochayuyo. Ve añadiendo poco a poco la patata, calabaza y las demás verduras troceado en piezas pequeñas e irregulares. Cuando tengas todas las verduras, rehoga 5 minutos más. Después añade el agua que deberás haber calentado previamente para evitar que se rompa el barro. Sazona al gusto, añade el tomillo y una pastilla de caldo vegetal de calidad, o todavía mejor, una cucharada de setas trituradas. Deja cocer a fuego lento, tapado durante 20 minutos o hasta que la verdura esté tierna. Esta sopa acepta todo tipo de variantes, puedes añadir cereales, leguminosas, usar las verduras que tengas en ese momento, añadir un poco de salsa de tomate, jengibre, etc.
¡Que aproveche!
Alimentos ácidos y alimentos alcalinos

Cada vez se escuchan más noticias sobre la dieta humana y se le da más importancia a la alimentación, a las investigaciones científicas y a los estudios sobre el impacto de los alimentos en la salud; conceptos como: dieta alcalina, inflamación celular, nutrigenómica, alimentos ácidos, relación del cáncer con la alimentación, etc… toman protagonismo en la sociedad actual.
Hoy queremos abordar una de esas teorías, se trata de la dieta alcalina, si bien es cierto que no tiene una demostración científica, son muchas las corrientes nutricionales y alimentarias que avalan las bondades de este tipo de alimentación. Aunque no debemos caer en extremismos, sea con esta dieta o cualquier otra; sabiendo que los alimentos procedentes de la naturaleza, que no han sido manipulados industrialmente para incrementar su sabor, olor y textura, son adecuados para nuestro organismo.
¿EN QUÉ CONSISTE UNA DIETA ALCALINA?
La dieta alcalina no es una dieta para que perdamos 10 kilos en una semana, ni para que aumente nuestra masa muscular. La dieta alcalina, ayuda a mantener nuestro cuerpo sano y previene diferentes enfermedades. Esta dieta es más una forma de alimentarse, que algo que hay que hacer durante un periodo determinado de tiempo.
El concepto de la dieta, es que debemos de tener un consumo equilibrado de alimentos alcalinos y ácidos para mantener un pH en la sangre de 7.4.
- Valor de pH: Menos de 7 = Ácido
- Valor de pH: 7 – 7,5 = Neutro
- Valor de pH: Más de 7 = Alcalino
*El pH es nuestra medida de acidez o alcalinidad en el cuerpo y lo podemos medir por medio de la orina y la sangre.
Nuestro cuerpo ocupa un pH alcalino para que las enzimas digestivas y metabólicas y nuestros órganos trabajen en su nivel óptimo y así mejorar el funcionamiento de nuestro cuerpo.
¿TENEMOS UN CUERPO ÁCIDO?
Podríamos detectarlo atendiendo a estos síntomas:
- Sensación de cansancio continúo.
- Dolor de espalda constante.
- Pelo y uñas quebradizos, sin brillo y sin fuerza.
- Tener constantemente resfriados y bajadas de defensas.
- Aumento de peso sin motivo aparente.
- Hipertensión arterial, gota, osteoporosis, artritis… entre otras patologías.
BENEFICIOS DE LA DIETA ALCALINA:
- Desintoxica el cuerpo y elimina el ácido del organismo
- Desarrolla una buena flora intestinal
- Regula el metabolismo
- Reconstruye el sistema inmunológico
- Restaura la salud de los órganos principales, protegiéndolos de enfermedades como el cáncer.
ALIMENTOS ÁCIDOS
Arroz integral, Arándanos, Avena procesada, azúcar blanco y moreno, bebidas gaseosas, café, centeno, cerdo, cerveza, ciruelas, espelta, zumos procesados, harina, helados, huevos, leche, maíz procesado, aceite de maíz, cacahuetes, mantequilla, mariscos, nueces, pan blanco, pan de trigo integral, pastas , pavo, pescado, pollo, quesos, ternera, trigo, yogurt.
ALIMENTOS ALCALINOS
Aceitunas, aguacate, ajo, algas marinas, almendras, apio, brócoli, calabaza, calabacín, castañas, cebolla, cerezas, ciruelas pasas, coco, dátiles, duraznos, espinacas, guisantes, higos, hongos crudos, kiwi, leche y queso de cabra, lechuga, limas, limones, maíz, mango, melones, aceite oliva, papaya, pepinos, peras, perejil, pimientos, piña, plátanos, remolachas, repollo, sandia, stevia, té de hierbas, té verde, tomates crudos, pomelo, uvas, uvas pasas, zanahoria.
*Lo ideal sería comer un 80% de alimentos neutros y/o alcalinos y el 20% restante de alimentos ácidos para alcanzar el equilibrio y que nuestro organismo funcione correctamente y nos mantenga sanos.
Esperamos que esta información os haya resultado interesante. Si queréis mandarnos vuestras impresiones, sugerencias, opiniones… no dudéis en hacerlo, os estamos esperando!