Pilates en casa ¿cómo empezar?
Pilates en casa ¿cómo empezar?
By: Olga Castañeda | Sep. 30, 2015
¡Enhorabuena! Si estás leyendo estas líneas es porque por fin has decidido hacer pilates en casa para dedicarle un tiempo a tu cuerpo, a la higiene de tu postura y hacer que tu organismo, cuerpo y mente, funcione al 100% mediante la práctica de pilates allá dónde nos encontremos, siempre y cuando queramos, sin restricciones de horarios o localización.
Si todavía estás indeciso y el hecho de practicar pilates en casa, una disciplina que desconoces por completo te causa cierta desconfianza, esperamos que con estas sencillas recomendaciones, todas tus dudas queden resueltas.
Aquí encontrarás recomendaciones para que tu práctica de pilates en casa sea un éxito:
- La práctica de pilates en casa requiere de ciertos conocimientos iniciales, ya que hay algunos conceptos para la colocación del cuerpo específicos, como:
- Estabilización escapular
- Elongación axial
- Pelvis neutral vs Pelvis imprint
- Powerhouse
- Pilates suelo vs Pilates máquinas
- La respiración es uno de los principios fundamentales, pero no debemos obsesionarnos con ello, la práctica hace al maestro, así que paciencia porque poco a poco iremos interiorizando la “respiración torácica” que se realiza en pilates.
- Si vamos a realizar pilates en casa, es importante que elijamos un espacio en el que nos aseguremos que vamos a estar durante ese rato tranquilos, sin ruidos, sin teléfono, televisor (a no ser que sigas la clase desde ahí) y con la firme disposición de fijar unas horas de práctica a la semana. Lo más recomendable son 2 horas (mínimo) a la semana.
- El espacio en casa debe ser lo suficientemente amplio para que cuando estemos tumbados en el suelo veamos que si estiramos los brazos y las piernas no van a chocar con ningún mueble.
- La esterilla de pilates debe ser algo más gruesa que una de yoga, especialmente por los ejercicios en los que rodamos con la espalda por el suelo. *Cuidado, las de camping no son las más adecuadas, son excesivamente gruesas y se pierde la referencia de fijación en el suelo.
- La ropa de pilates debe ser cómoda, con la que no sintamos ninguna restricción en nuestros movimientos. Si es traspirable mejor… ¡Sudarás!
- Pilates se practica descalzo, con o sin calcetines, según gustos.
- Es importante que una vez comenzada tu práctica de pilates en casa, llegues hasta el final. Si percibimos que algún ejercicio no nos va bien, pararemos de hacerlo y reanudaremos cuando haya cambiado. Aquí vemos la importancia de estar tranquilo y sin distracciones, necesitaremos estar bien conectados con nuestro cuerpo y percibir sus sensaciones.
- Habrá algunas prácticas en las que se usarán implementos, como una banda elástica o una pelota pequeña, son materiales sencillos de conseguir y fáciles de guardar. Así podrás crear tu propio ‘kit pilatero’ para practicar pilates en casa.
- El dispositivo que utilices para visualizar las clases de pilates en casa: la TV, una tablet o un Smartphone, asegúrate de colocarlo en un lugar que te sea cómodo para no torcer el cuerpo o la cabeza para seguir las indicaciones del profesor.
Ahora ya estás preparado para ejercitar cuerpo y mente en tu casa, de viaje, en la playa, en la montaña…
Para empezar os recomendamos estas prácticas guiadas de nuestra profesora Vicky Timón en las que podréis comprobar en qué nivel os encontráis. Vicky con la colaboración de tres alumnas, nos enseña ejercicios básicos con sus modificaciones, según la condición física de cada persona ¿No está mal para empezar, verdad?
Prueba nuestro programa de pilates para principiantes
Os esperamos en Aomm.tv
4 Cosas que solo un yogui puede entender
Son bien conocidos por la mayoría de las personas, al menos las que seguimos este blog, los enormes beneficios que la práctica continua de yoga aporta a medio y largo plazo, para la unidad del cuerpo – mente, que es la combinación de los aspectos físicos, psicológicos y espirituales del individuo.
Para conocer bien los beneficios que el yoga nos aporta, te recomiendo este artículo donde podemos comprender porqué esta forma de ejercicio físico y mental va más allá de una mera disciplina orgánica, porqué se lleva practicando miles de años y porqué ha trascendido épocas y fronteras hasta llegar a nuestros días.
Pero hoy vamos a sumergirnos más allá de los beneficios, hoy veremos qué cosas ve, siente y comprende un yogui realmente.
1-. CONOCIMIENTO GLOBAL DEL CUERPO
Más allá de lucir un cuerpo fibroso, elástico o esbelto, la práctica del yoga aporta a su practicante un conocimiento global y absoluto de su cuerpo. El yogui desarrolla una importantísima cualidad de ESCUCHA y ACEPTACIÓN de su cuerpo, de su energía, de sus límites y de sus fortalezas.
2-. AUTOCOMPASIÓN
Nada tiene que ver el “tenerse lástima” o “ser víctima”, esos términos en yoga no se contemplan, son meras etiquetas occidentales. Cuando en yoga hablamos de compasión, es tomar responsabilidad, es compartir, es aceptar… el yogui cultiva, poco a poco, una compasión para consigo mismo de “querer tratarse bien”, tanto en el plano físico, como en el emocional. Sin confundirlo con la egolatría, solo las personas que están a gusto consigo mismas y se tratan bien, pueden hacerlo con los demás.