Postura de yoga: Ustrasana o el camello

Postura de yoga: Ustrasana o el camello
Por: Gaia | Apr. 02, 2014
Ustra significa camello.
TÉCNICA DE LA POSTURA USTRASANA
- Arrodíllate en el suelo con las rodillas y pies juntos, los empeines apoyados en el suelo y los dedos apuntando hacia atrás.
- Apoya las manos en las caderas y estírate hacia arriba.
- Toma aire y aprovechando la apertura del tórax, comienza a arquear la columna lentamente hacia atrás.
- Con la exhalación, apoya la mano derecha en el talón derecho y la izquierda en el talón izquierdo.
- Echa la cabeza hacia atrás.
- Empuja la pelvis hacia delante para mantener los muslos perpendiculares al suelo.
RECOMENDACIONES PARA LA POSTURA USTRASANA
- Ustrasana es una postura exigente, que requiere buena elasticidad en la columna. Al principio es posible ejecutarla con las rodillas y pies un poco separados. Pero a medida que ganemos flexibilidad es necesario volver a juntarlas.
- Estírate hacia arriba antes de comenzar a arquear la columna.
- Intenta iniciar el arco y apertura en la posición vertical. Evita dejarte caer hacia atrás en bloque o acercar los glúteos a los tobillos.
- Contrae los glúteos y empuja la pelvis hacia delante, teniendo cuidado en no lastimar la zona lumbar.
BENEFICIOS DE LA POSTURA USTRASANA
- La postura ustrasana produce un potente estiramiento de la musculatura anterior del tronco y de las fascias.
- Desarrolla la caja torácica y facilita la respiración intercostal.
- Dota de elasticidad a la columna vertebral.
- Masajea los riñones y glándulas suprarrenales, mejorando su función.
- Estimula el funcionamiento de la glándula tiroides.
- Estira los músculos de la parte superior de los muslos.
CONTRAINDICACIONES DE LA POSTURA USTRASANA
- Ante lesiones graves en la columna vertebral o las rodillas se recomienda prudencia.
Si quieres practicar la postura ustrasana dentro de una sesión guiada puedes hacerlo siguiendo la clase Abre tu corazon de Isabel Ward, profesora de Gaia.
Posturas de yoga preferidas por las mujeres

Hoy nos atrevemos a apostar por cuáles son las posturas que más gustan a las mujeres. Basándonos en las preferencias que escuchamos de nuestras alumnas, las hemos resumido en estas cuatro, pero nos encantaría saber cuál es la postura que a ti más te gusta y porqué.
Tal vez en la siguiente lista te encuentres identificada en alguna:
1-. VIRABHADRASANA II” (Postura del guerrero II)
Con esta postura las mujeres sienten cómo se fortalecen sus muslos, glúteos y caderas. Aporta equilibrio y armonía a la postura. Hacer el guerrero II requiere de mucha energía, por lo que se debe respirar profundamente, al tiempo que los brazos y las piernas se mantienen firmes.
2-. UTKATASANA” (Postura de la silla)
A muchas mujeres les gusta mucho esta resistente postura porque a través de ella sienten cómo trabajan las nalgas. Además con ‘la silla’ se fortalecen el vientre, la espalda y los muslos. Es fundamental que al flexionar las rodillas, nunca más allá de la punta de los pies, la columna se mantenga lo más larga posible, sintiendo una línea continua desde la coronilla hasta el coxis. Los hombros deben de estar relajados y buscan formar parte de esa línea entre coronilla y coxis.
3-. VRKSASANA” (Postura del árbol)
Cuando sentimos la mente dispersa, la postura del árbol nos ayuda a aumentar nuestra capacidad de concentración y calmar la mente. Mejora el equilibrio, fortalece los tobillos, las caderas y rodillas. Es importante que el pie que se apoya en la otra pierna no lo haga nunca sobre la rodilla, ya que es un punto articular del cuerpo fundamental sobre el que no debe recaer un sobre peso innecesario. Para ello te recomendamos que si no llegas a colocar el pie en la cara interna del muslo contrario, lo hagas en el tobillo.
4-. SETU BANDHASANA” (Postura del puente)
Con esta extensión se fortalece y se abre el pecho, las caderas, la espina lumbar y la cara anterior de los muslos. Para las mujeres es un estiramiento excelente después de cualquier sesión de ejercicio físico, ya que el puente actúa directamente sobre el sistema nervioso. Al deshacer la postura se puede realizar de manera dinámica, articulando la columna en la bajada vértebra a vértebra, percibiendo como cada hueso vertebral se coloca sobre el suelo.