Postura de yoga: Simhasana o el león
Postura de yoga: Simhasana o el león
Por: Gaia | Sep. 11, 2014
Existen diferentes variantes y versiones sobre esta postura, aunque todas parecidas entre sí. Sin duda es una de las posturas que más risa causa durante una sesión en grupo, aunque no debemos tomarla en broma, ya que tiene grandes beneficios.
TÉCNICA – Sentado sobre los talones y con las rodillas separadas. Una versión más avanzada es con el tobillo derecho cruzado sobre el izquierdo. En ambos casos los empeines están estirados y en contacto con el suelo.
– Apoya las manos sobre las rodillas con los brazos estirados y las corvas de éstos hacia delante.
– Toma aire y mientras exhalas (por la boca) proyecta el cuerpo ligeramente hacia delante a la vez que estiras y separas los dedos de las manos, como si fuesen las garras del león. – Al mismo tiempo abre la boca y saca la lengua llevándola todo lo que puedas hacia abajo.
– También deberás orientar tu mirada hacia el entrecejo o la punta de la nariz. – Todo ello mientras pronuncias un ‘ahhhhh’, el rugido del león. – Durante la siguiente inhalación vuelve a la postura inicial.
– Repite el ejercicio entre 5 y 10 veces. * En una práctica avanzada de Simhasana, se introduce “Mula Bandha o contracción perineal durante la exhalación, y “Uddiyana Bandha” o contracción del abdomen al final de ésta.
BENEFICIOS
– Tonifica toda la musculatura corporal.
– Limpia los canales energéticos.
– Es beneficioso para las glándulas genitales debido a la compresión del perineo con el talón.
– Tonifica los músculos de los ojos y produciéndose un aflujo de sangre a esta zona. – Es beneficioso para las cuerdas vocales y mejora el tono de voz. – Facilita la expresión y la comunicación, asociadas al quinto chakra, “Vishuddha,
– Beneficia a las glándulas tiroides y paratiroides.
– Ayuda a prevenir las gripes y las inflamaciones de garganta.
CONTRAINDICACIONES
En caso de hipertiroidismo se practicará con prudencia.
Está desaconsejada en caso de dolencia cardíaca grave.
Si quieres practicar yoga cuando y donde quieras entra en Gaia.
No quiero hacer esa postura de yoga
La asana es una postura de yoga con la que se busca mejorar tu cuerpo y tu mente. Hay diferentes tipos de asanas: de pie, de flexión posterior, flexión anterior, torsiones, posturas de equilibrio, invertidas, de relajación y meditación. Es normal tener preferencias por un tipo según tus características físicas y mentales. Así, hay algunas que practicarías todos los días y hay otras que no practicas voluntariamente.
No quiero hacer esa postura de yoga
Todos hemos tenido alguna vez una asana que no nos gusta y que nos produce rechazo.
Cuando nuestro profesor nos indica su práctica, mentalmente nos quejamos y deseamos que pase rápido. Durante los siguientes minutos resoplamos y miramos a los compañeros que muestran un excelente dominio de la postura que nosotros no tenemos mientras nos tiemblan los músculos.
Pues esa es la postura que más hemos de practicar. Cuando mental y físicamente rechazamos una asana es de la que más podemos aprender.
Debemos preguntarnos:
- ¿Por qué no me gusta esta postura?
- ¿Contra qué estoy luchando?
- ¿Tengo una dificultad física real o mental?